sábado, 31 de enero de 2009

Paz y Ciencia

Enséñame a esperarte. Explícame cómo agoto los días sin que la ansiedad me haga parte de su cena. Dame datos precisos de la manera en qué puedo avanzar en el tiempo sin precipitarme. Oriéntame al camino que conduce a la plenitud que invita tu piel. Muéstrame dónde está la paz que necesitan mis horas para tranquilizar este corazón ávido de tus letras, para domar mi mente que inventa una nueva historia cada vez con un mismo final... Convéceme de la exactitud de nuestra ecuación y del resultado que arroja. Comprueba ahora la reacción de los compuestos y verifica sí efectivamente es lo que buscas... Es evidente que carezco de tranquilidad y de paciencia.. La química no implica inmediatez... Esta vez, entre la paz y la ciencia me he quedado mirando el reloj....

sábado, 24 de enero de 2009

El centro de mi equilibrio...


No me ha servido intentar contar hasta diez porque no he llegado al cinco cuando ya me estoy riendo... No he terminado de celebrar la última risa cuando ya he juntado las cejas otra vez. Sí, estoy exagerando, pero lo cierto es que mi humor se ha convertido en un tío vivo que no deja de girar y que siempre vuelve al mismo punto... Como un led intermitente de navidad, mi ánimo se apaga y se enciende cada cierto tiempo... Y así he andado por la vida durante los últimos días, paseándome en una onda senoidal de temperamento... A veces con razones otras tantas sin ellas. No he podido controlarlo. Tal vez no he querido. La rabia es quizás por cosas no resueltas, no claras aun... la explosión de alegría deviene de asunto medio ganados, de pequeños pasos que conquisto de a poco... Es allí donde esté el meollo de todo. Es un punto intermedio. No sé si enojarme porque no estoy más lejos o más rápido, o contentarme y brincar porque estoy más cerca que ayer... Listo! Una solución salomónica sería mantener una actitud neutral... Ni mucho ni poco, ni calvo ni con dos pelucas... Y esperar un poco quizás... porque en el centro está el equilibrio y si lo mantengo bien no caeré jamás!

lunes, 12 de enero de 2009

Del Crepusculo al Angelus

El viento crepuscular te trajo conmigo. Yo había llegado desde el oriente. Encontrados en este punto intermedio. En algún lugar. En este espacio. Nuestro de a ratos. La constelación de tu espalda me mostró el camino. Yo con mis alas volé por tu cielo... Con la tímida luna llena espiándonos de cerca anduvimos por este camino incierto... No sabíamos adonde nos llevaría, sin embargo marchamos a través de la noche... Hasta que el sol nació en tus ojos, y en medio de la alborada me vestí de sonrisas; tú con mis manos... en medio de la aurora te vestiste de mis besos, yo con tus manos... Y otra vez el camino... Nos invita a seguir... del crepúsculo al amanecer... del ángelus a la aurora... desde aquí, desde este ahora... hasta donde nuestros sueños nos dejen llegar...

jueves, 1 de enero de 2009

Calles Vacias

Después de dormir lo suficiente decidí dar una vuelta cerca de casa empujado por uno de mis vicios... El día soleado, fresco, solitario, silencioso... Extrañé mi bicicleta para recorrer un poco más y disfrutar de la paz que brindaba la ciudad. Imaginé por un segundo lo hermosa que podría lucir Caracas sin nada de tráfico y callada... "Me gusta cuando callas", jejeje Anyway, no tenia intención de hablar de las colas y ni de la urbanidad el día de hoy. En realidad no quería hablar de nada, deseaba dejar el post en blanco, como un lienzo vacío para llenarlo de colores, matices y texturas... Hacer la alegoría a la virginidad de los días venideros. Rebosarlos de sonrisas, de conquistas, de logros, de luchas y esfuerzos, de esperanzas, de experiencias, de tus gestos, de tu compañía... De felicidad... Días para construir, para crear, para recordar... Ven conmigo! Toma mi mano y demos un paseo por estas calles vacías... obtén un boleto y hagamos este viaje juntos. Llenémonos de vida!