lunes, 29 de octubre de 2007

En el Pasillo 54


----: "¡Patricia! Ya lo tengo todo. Mira, aquí están los murcielaguitos para colgar. Traje tres sombreros de Brujas. ¡Espectaculares! Uno para ti, uno para mi, y el otro para el maniquí. Con la guata, hacemos la tela de arañas y las colgamos también. Creo que compré todo lo necesario. Ay mira, esta linda calabacita para meter el sencillo o unos caramelitos para los clientes. Este fantasma de papel, lo colcamos aqui, verdad? Ahí no estorba... La gente desde aquí puede ver bien las blusitas. No quise traer globos porque ya todos tienen bombas, y qué flojera la sopladera... No, no, no. ¡Nosotras tenemos que tener la mejor decoración del pasillo 54! Ay, Ay, Ay, me faltó comprar esqueletos! ¡No pueden faltar los esqueletos! Ya vengo..."


Yesenia le entregó los paquetes a Patricia rápidamente y corriendo salió del Mercadito de Buhoneros, para poder comprar a tiempo el resto de los adornos que le faltaban...

martes, 23 de octubre de 2007

La Reina de las Colas



Al cuerno la propuesta del nuevo nombre de nuestra ciudad! Ese que nos imposibilita el nexo con ella al hacer impronunciable, inconcebible, ajeno y extremadamente extenso el gentilicio. ¿La Reina de qué? ¿Del Guaqué? Gua-yo gua-no gua-sé gua-qué gua-es gua-e gua-so... Ah El majestuoso Ávila! Ok! Pero en lugar de proponer nombres y rebautizos, deberían ocuparse de cosas más trascendentes e importantes... como la inseguridad, por ejemplo. El problema habitacional, las invasiones... porque aunque se llame Caracas, Cadrid, Caris, o la Cuna del Simón, o la Reina del Guayoyo... No dejaría de ser entre otros reinados y títulos reales, La Reina de Las colas... Por donde te metas, encontrarás un duende que paraliza el tráfico, y tu carro o el vehículo donde te muevas, se quedará paralizado por horas en un hermoso concierto de cornetas, sirenas y recuerdos maternos... Ese espectáculo que hará trizas a tu paciencia, si es que aún te queda, y bailará el sebucán con tu buen humor y las últimas esperanzas de llegar puntual a tu destino. ¡Nuestro valle se ha convertido en un estacionamiento gigante! Así que nos quedará de otra que comprarnos un helicóptero para ir a nuestros trabajos, pero eso sí, con un silenciador en el motor, para que cuando giren sus aspas, no despertemos al Libertador que duerme tranquilo en su Cuna... jejeje

miércoles, 17 de octubre de 2007

Una Boca

Carnosa. A veces roja, otras rosa. Cerrada. Sonríe. Me cuenta de ti, de tus días, de tu vida, de tus planes. No escucho. Sólo leo las palabras que dibuja. Y le sigo atentamente. Se abre. Se ríe. Se estira. Se transforma en cielo. Yo vuelo. Calla. Y sigo espiando, listo para capturar la siguiente palabra. Besa. Vuelve a sonreír. Muero y vivo a la vez. Se refrescan. Se tornan suaves. Tal vez dulces. Hipnotiza. Sólo observo. Se acerca. Tiemblo. Se aleja. Levito. Ahora sonrío...

lunes, 8 de octubre de 2007

El laberinto y el Mini-Tauro


Como buen Tauro, la testarudez es una de mis características más resaltante... Esa misma obstinación que me ha servido mucha veces para enfrentar las dificultades más sórdidas, que me ha ayudado a vencer los obstáculos más enrevesados; y me ha regalado al final de la lucha, la banderilla de una victoria más... Hoy se ha vuelto en mi contra, y he caído en la provocación de embestir una vez más, contra esa arrogante pared con la inútil idea de convertirla en puerta, como los toros en el rodeo que al ver agitarse la colorida capa se arrojan ciegos hacia la espada del torero... Sólo he conseguido adornar mi cabeza con otro par de chichones, y chocando sin parar contra los muros de este laberinto, permanezco perdido en medio de mi tozudez... Tirado en el suelo con este inmenso dolor de cabeza, esperaré a que la luz y la ecuanimidad, (otra de mis características resaltantes) retornen a mis ideas... para encontrar la salida que seguramente se ríe burlona a mis espaldas...

martes, 2 de octubre de 2007

Soltando...

Como el lastre que sueltan los barcos para estar más livianos y así evitar hundirse... Como el peso que dejan caer los globos, procurando con esto elevarse más alto... así he abierto mi mano liberando la cadena que me ataba allí... esa soga que ya estaba quebrandome la piel... Debo confesar que no es nada fácil, soltar las dudas, el miedo, la inseguridad, que a veces se convierten en una camisa de fuerza hecha a la medida nuestra... Me siento más liviano, más ligero, más expuesto, sé que las frescas heridas secarán con un nuevo aire, ése que estoy próximo a respirar... Sé además que mi piel cicatriza bien, y no quedarán marcas donde antes hubo dolor... y yo podré mirar ese lugar desde lo alto, hacia donde me dirije este nuevo amanecer...